A veces la vida...
se alegra de tenerme,
en la parte que me toca de sentirte...
de abrumarme en las sienes de tu lluvia
que tu pelo me ha mezclado de cerca
en los robustos silencios...
acribillados de tus goznes,
de los oscuros caminos de tu boca.
A veces la vida...
me regala esta pizca de tu piel
sobre mi frente.
Este sollozo de preguntas
que resbalan por tu vientre
endemoniado color de tus sombras,
que predican un amor
sin pretenderlo.
Hondo el candor de sentirlo todo...
te vas y me dejas en tus ojos,
estrías de amor impenetrable,
que arderá para siempre...
Da gusto deslizarse por tus poemas. Como te decía, en especial los de amor. Aplausos para éste.
ResponderEliminarUmbriel
Gracias Umbriel, te agradezco la lectura...
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